Romanos
13: 1-2
Dios
ordena a sus hijos a obedecer a la autoridad. Si no conocemos la importancia de
la autoridad delegada por Dios, no podremos vivir una vida cristiana victoriosa
porque siempre estaremos fuera de la voluntad del Señor. La Autoridad delegada por Dios. Dentro de la familia, Dios
ha establecido que el varón será cabeza del hogar 1ra.Corintios 11:3, 1ª.
Timoteo
3:4; y que la mujer debe
sujetarse a él. Ef. 5:22, Col. 3:18, 1ª.
Pedro 3:1. Si conocemos las leyes de la autoridad que Dios nos
da, caminaremos en su perfecta voluntad. Primera Ley de Autoridad. "La persona que tiene
autoridad tiene que estar sometida a su autoridad.
El
apóstol Pedro le dice a la esposa cómo debe comportarse para llevar a Cristo a
su esposo que no cristiano debe someterse a su esposo y reconocer que él es
cabeza de la familia de la familia.
Para el esposo esto significa estar sujeto a
Jesucristo, al Padre Celestial, a sus autoridades espirituales y autoridades en
su trabajo. La esposa debe sujetarse a su esposo, los hijos a sus padres. Si
alguien se rebela a la autoridad, no tendrá la autoridad que Dios da. Segunda Ley de Autoridad.
La persona
que tiene la autoridad, tiene la responsabilidad de cuidar a los que están
sometidos a él. Cristo tiene autoridad sobre nosotros, su rebaño, su cuerpo.
Nos cuida, guarda y alimenta; el esposo hace lo mismo con su familia.
Tercera Ley de Autoridad. "La persona que tiene
autoridad, y no está sometida a su propia autoridad, (o no cumple su
responsabilidad de cuidar los que están sometidos a él), está en rebelión y
pierde la autoridad apoyada por Dios".
En 1ª. Samuel 15:23. La Palabra nos enseña que el pecado de
rebelión es como hechicería e idolatría y la persona deja puerta abierta a los
ataques de Satanás. Cuarta Ley de
Autoridad. Si una persona que tiene autoridad está en rebelión, abre la
puerta a un espíritu de rebelión en las vidas de los que deben estar sometidos
a él.
Por ejemplo: un padre que está en rebelión,
puede encontrar rebelión en su esposa y en sus hijos. El pecado de
“adivinación” es procurar manipular los acontecimientos. A las personas o el
futuro por medio de los espíritus inmundos.
La Sumisión de la Esposa. Ef. 5:23
y 33, 1ª. Pedro 3:1-2. La
Sujeción. (Sumisión) y el Respeto están
basados en: La Aceptación: Darle valor o dignidad a una persona.
Aceptarnos a una persona cuando la apreciamos y la queremos tal como es. Todo individuo
tiene derecho a ser respetado y ser diferente. Reconocer la autoridad delegada por Dios.
CONCLUSION:
Cuando se
reconoce la autoridad el esposo, estará en descanso porque no toma la responsabilidad que recae en el hombre. Las
esposas no tienen las responsabilidades hechos emocionalmente. La palabra de
Dios, nos habla muy claramente que los creyentes deben obedecer a sus
autoridades establecidas por Él, es el deber de todos los creyentes.